Uno de los mayores gastos del hogar o de la empresa es la factura de luz. Una vez más, hemos notado un incremento en ella este verano. La preocupación radica en que no va a quedarse así, seguirá subiendo. ¿Sabes por qué?Podemos retroceder diez años en nuestras facturas y solamente en uno de ellos alcanzamos cifras similares a este 2018. El recibo medio anual será de 788€.
El pasado mes de abril, comenzó una escala que no ha parado ni siquiera durante el verano. De hecho, se estima que continuando en esta línea superaremos los límites más altos a final de año.
Analicémoslo por partes. Un consumidor tipo cuenta con 4,4Kw de energía contratada y consume una media anual de 3.500 Kilovatios. Este consumidor pago en julio 66,40€, un 2,1% más que en junio y un 4,5% más que en el mes de enero del mismo año. Un cambio considerable para tratarse de unos pocos meses. Pero ni siquiera esta es la cifra más llamativa. Quizás si te cuento que ese ciudadano ha pagado un 31% más que en el mismo mes de 2009 si lo encuentres exagerado.
Los estudios estiman que su factura en diciembre será de 71€, un 5,3% que en 2017. Está claro que la factura está subiendo cada vez más deprisa, pero…
Todos estos datos pueden extrapolarse mediante porcentaje a las empresas. Un variación de un 31% en cuestión de 9 años es un gran incremente en un gasto necesario para todos los negocios.
¿Cuál es el motivo?
La subida se debe principalmente al aumento de precio de los mayoristas de la electricidad. Los tres componentes de la factura de la luz son: impuestos + costes fijos + precio mayoristas.
Los precios de los mayoristas se encuentran por encima de la media de los últimos 10 años. El carbón, el gas y los derechos de emisión de CO2 se han encarecido al igual que nuestras facturas.
Generar la energía, tal y como la conocemos, está resultando más caro. En concreto, el carbón ha subido un 5% tan solo en los últimos meses y el gas un 3,4%.
Por otro lado, los gastos por derechos de emisión de CO2 se han triplicado en el último año. De hecho, en los últimos meses han pasado de 16,90€ a 20,90€ la tonelada, aumentando un 23,7%.
Otro factor a influenciar en esta subida ha sido la parada de algunas de las nucleares de nuestro país. De esta manera, dejan de aportar a la producción española. Nuestro país vecino, Francia también paralizó hasta 20 nucleares el año pasado. Así, comienza a importar la energía española en lugar de exportarla.
Todo esto se traduce a más demanda y menos oferta. Es decir, suben los precios.
¿Quién fija el precio del Kilovatio? Los dos mercados eléctricos
La parte variable de la luz, los precios de los mayoristas. Hay dos formas de fijar el precio del Kilovatio.
En primer lugar, tenemos el Mercado Libre. En él, se establecen los precios sin ningún tipo de control por parte del gobierno.
En segundo lugar, el precio voluntario al pequeño consumidor. En este caso se fija a través del mercado mayorista mediante un contador digital o un contador analógico.
- Mercado libre: el precio lo fija la empresa y figura en tu contrato. Igual que sabes cuánto vas a pagar por un minuto de llamada con tu compañía telefónica tendrás la tranquilidad de saber cuánto te va a costar cada Kilovatio que consumas. Es precio no variará, llueva más o menos o haga más frío o calor.
- PVPC: el precio cambia hora a hora y día a día según la oferta-demanda entre quieres producen energía (compañía generadora) y quienes la venden (comercializadora). Si tienes contador digital pagarás más si consumes en horas caras y menos si concentras el gasto en las horas baratas. El contador analógico realizará un precio ponderado.
Y tú, ¿sabes cómo pagas la factura de la luz? Si quieres ahorrar al máximo en el consumo de tu factura no dudes en visitar nuestra WEB y tomar medidas como renovar a LED tus luminarias o colocar sensores de movimiento. ¡Te esperamos!